La noche del viernes se tornó particularmente oscura para los habitantes de Venado Tuerto y gran parte del sur de Santa Fe. A las 22.01, un imprevisto corte de energía eléctrica impactó a la región, dejando a miles de personas sin luz hasta bien entrada la madrugada del sábado.
Desde la Empresa Provincial de Energía (EPE), rápidamente se comunicaron a través de sus redes sociales para informar sobre la situación. Según detallaron, el problema se originó por una desconexión en la línea de alta tensión que conecta Casilda con Chabás. Este incidente obligó a la empresa a solicitar la generación de electricidad desde las plantas locales de Venado Tuerto y Rufino, mientras se recorría la traza de la línea en busca de la falla. La magnitud del corte fue significativa, afectando a aproximadamente 50 megavatios.
“Estamos trabajando para resolver el inconveniente lo más pronto posible”, indicaron desde la EPE, conscientes de la inquietud que genera un evento de estas características en la comunidad. Con el transcurrir de las horas, la situación fue complicándose y la preocupación se hizo palpable en las calles, donde los negocios cerraron y los hogares quedaron sumidos en la penumbra.
A las 23.25, desde la EPE se anunciaron avances en la reposición del servicio, específicamente desde la estación transformadora de Rufino. Sin embargo, la Cooperativa Eléctrica de Venado Tuerto amplió la información, apuntando que la línea de 132 kV de la EPE había quedado fuera de servicio entre Firmat y Rufino, lo que complicó aún más el panorama energético de la zona.
Mientras tanto, los vecinos de Venado Tuerto se unieron en la incertidumbre. Algunos optaron por salir a las calles, buscando la calidez de las reuniones informales en la penumbra; otros, más preocupados, intentaron comunicarse con familiares que también estaban en la misma situación. Las luces de las linternas y las velas se convirtieron en las protagonistas de una noche que no solo privó a la localidad de luz, sino que también afectó la tranquilidad habitual del sur santafesino.
Finalmente, en las primeras horas del sábado, el servicio comenzó a restablecerse y las luces volvieron a iluminar los hogares. Sin embargo, el eco de esa experiencia quedó en el aire, recordando a los vecinos que, en un instante, la rutina puede verse alterada y que la dependencia de un servicio esencial puede poner en jaque la cotidianidad de una comunidad. Las autoridades, por su parte, se comprometieron a esclarecer las causas del incidente y trabajar en medidas preventivas para evitar que una situación así se repita en el futuro.