El gobierno de Venado Tuerto procedió a la clausura de un jardín materno-infantil de gestión particular, ubicado en la calle Moreno 1.700, tras una inspección que reveló una serie de incumplimientos graves a la ordenanza municipal 5526/22, que regula la actividad de este tipo de establecimientos. La clausura, efectuada este mediodía, se produce tras una denuncia presentada por la madre de un bebé que asistía al jardín y una posterior inspección conjunta realizada por personal de la Secretaría de Control Urbano y la Dirección de Educación.

La inspección, llevada a cabo el jueves, se originó a partir del relato de una madre preocupada por las condiciones en las que se encontraba su hijo, menor de un año, en el establecimiento. Si bien el jardín contaba con habilitación municipal, la inspección constató una irregularidad crítica: la ausencia de una maestra jardinera con título habilitante a cargo de los niños.

"Si bien es frecuente que en los jardines trabajen estudiantes de la carrera como asistentes, es imprescindible la presencia y supervisión de una maestra recibida," explicó la secretaria de Control Urbano, Silvia Rocha. "En este caso, el personal municipal se encontró con una joven a cargo de cinco niños, tres de ellos menores de un año. Esta joven estaba sola, sin ningún tipo de asistencia. La titular del jardín, que sí posee título habilitante, no se encontraba en el lugar. La situación que encontramos es de extrema irregularidad, porque es imposible que una sola persona pueda estar al cuidado de cinco niños, especialmente bebés, y realizar todas las actividades que requiere un jardín maternal."

La seriedad de la situación se agravó al constatar que las condiciones edilicias del jardín no se correspondían con las aprobadas en la habilitación original, otorgada tres años atrás. Ante la acumulación de estas irregularidades, se dio intervención al Tribunal de Faltas, se labró un acta de infracción y, en la mañana de hoy, se dispuso la clausura preventiva del establecimiento. Según fuentes municipales, el jardín no había abierto sus puertas en la jornada de hoy.

La clausura preventiva implica la suspensión inmediata de las actividades del jardín hasta que se subsanen las irregularidades detectadas y se garantice el cumplimiento de la normativa vigente.

La secretaria Rocha enfatizó la responsabilidad de la propietaria del jardín por la falta de personal adecuado y la ausencia de una maestra habilitada, pero también hizo un llamado a la responsabilidad de los padres. "Los padres tienen que ser conscientes de dónde dejan a sus hijos. Es fundamental que elijan una institución que les abra las puertas, que les permita conocer las instalaciones y preguntar quién será la 'seño' de su hijo," afirmó Rocha, subrayando la importancia de priorizar la seguridad y el bienestar de los niños, más allá de las urgencias laborales o las consideraciones económicas.

La investigación continúa en manos del Tribunal de Faltas, que determinará las sanciones correspondientes para la propietaria del jardín. Las autoridades municipales han garantizado que se realizarán controles más exhaustivos en este tipo de establecimientos para asegurar el cumplimiento de las normas y proteger la integridad de los menores.

Este incidente pone de relieve la importancia de la regulación y el control de los jardines materno-infantiles, así como la necesidad de que los padres se involucren activamente en la elección del lugar donde confían el cuidado de sus hijos. Se espera que este caso sirva como precedente y refuerce la vigilancia sobre estos establecimientos en la ciudad de Venado Tuerto.

El contenido de esta página requiere una versión más reciente de Adobe Flash Player.

Obtener Adobe Flash Player

Laboratorio de Analisis Clínicos

Mario Maestu