La calma habitual de la noche en el centro de Venado Tuerto se vio drásticamente alterada el pasado viernes, cuando dos viviendas, ubicadas a pocos metros una de la otra, fueron víctimas de robos bajo la modalidad de "escruche". Los asaltos, ocurridos en la misma franja horaria, generaron alarma entre los vecinos de la zona cercana al cruce de las calles Azcuénaga y Roca.

La fiscal Mayra Vuletic (foto), al frente de la investigación, ha clasificado ambos incidentes como parte de una misma serie delictiva, sugiriendo que podrían haber sido perpetrados por los mismos delincuentes. Según Vuletic, los ladrones, aprovechando la oscuridad de la noche y la no activación de las alarmas, accedieron a las propiedades a través de los patios traseros, forzando las rejas de seguridad con herramientas específicas que llevaban consigo.

“Se llevaron dinero en efectivo y, en uno de los casos, también una computadora”, detalló la fiscal, arrojando luz sobre la audaz metodología utilizada por los asaltantes.

Uno de los afectados, que prefirió mantenerse en el anonimato, relató cómo los delincuentes ingresaron a su hogar a través del jardín. “Rompieron una reja y revolvieron por todos lados. Se llevaron joyas, una cadena y pulseras que teníamos guardadas, incluso regalos de bautismo de los chicos, y cerca de $ 200.000 en efectivo”, compartió, visiblemente consternado por la intrusión y los daños causados.

Este mismo propietario agregó que, además de las joyas, los ladrones se llevaron un termo, un parlante Bluetooth y diversas pertenencias personales. Aunque su casa contaba con un sistema de cámaras de seguridad, la alarma no estaba activada durante el tiempo del robo. No obstante, las imágenes grabadas proporcionaron una pista valiosa para las autoridades, quienes ya fueron notificadas sobre el material visual.

A tan solo media cuadra del primer robo, se registró un segundo asalto, con un patrón similar. Los mismos oportunistas también forzaron el acceso trasero del inmueble y causaron un desorden considerable en su interior, llevándose una computadora nueva y otros objetos de valor.

La investigación está en marcha, y la Fiscalía mantiene la hipótesis de que estos robos son obra de una misma banda organizada, respaldada por la similitud en los métodos de operación y los objetos sustraídos. La rápida intervención de los efectivos policiales y la presencia de un equipo de Criminalística en la escena del crimen han sido altamente valoradas por las víctimas, quienes afirmaron que los policías llegaron “al toque” tras el aviso.

Con la comunidad en alerta y deseosa de respuestas, las autoridades intensifican sus esfuerzos para dar con los responsables de estas intrusiones, mientras los vecinos esperan que la seguridad regrese a sus hogares.