El individuo, un hombre con un amplio historial delictivo, había sido capturado en la mañana de hoy, tras llevar a cabo un raid delictivo que comenzó en el barrio Ciudad Nueva. En un inicio, el sospechoso ingresó a dos domicilios, donde amenazó a los moradores con un arma blanca, provocando una rápida intervención del personal policial. Sin embargo, el delincuente no se detuvo y continuó su huida, buscando refugio en domicilios cercanos mientras atacaba a un efectivo que intentaba detenerlo, causándole lesiones.

A pesar de los disparos realizados por la policía con municiones antitumulto, la persecución se extendió por un tiempo considerable. Finalmente, el delincuente fue arrinconado y aprehendido, siendo trasladado a la sede policial para completar el papeleo y averiguar sus antecedentes. La sorpresa llegó al conocerse que el detenido contaba con un extenso prontuario delictivo.

No obstante, lo que parecía ser el fin de una odisea se transformó en un nuevo problema cuando, aparentemente debido a un descuido policial, logró escapar de la comisaría. Las circunstancias de su fuga aún están siendo investigadas, pero se presume que se despojó de las esposas que le habían sido colocadas. El hecho desencadenó de inmediato un operativo policial para su recaptura, la cual se concretó horas después.

Como resultado de este incidente, la Fiscalía ha iniciado una investigación interna contra el personal de la Comisaría 2da. para determinar si hubo alguna connivencia o si la fuga fue producto de una negligencia. En vista de que el individuo posee antecedentes por delitos de robo, se ha decidido que permanecerá detenido en la alcaidía de Melincué mientras se llevan a cabo las audiencias correspondientes.

Este episodio resalta no solo la complejidad de la labor policial, sino también la necesidad de una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad en las fuerzas del orden.